jueves, 25 de abril de 2013

Montaña Rusa

En los 5 años que llevo estudiando mi carrera he aprendido pocas cosas por desgracia y aunque suene triste, una de esas pocas cosas que he aprendido a sido gracias a Punset:

Según un estudio, nuestras acciones influyen a nuestras relaciones hasta tres grados de manera directa e indirecta, es decir, una acción que yo realice puede influir a mi amigo, al amigo de mi amigo y al amigo del amigo de mi amigo. Todo hábito se contagia y por supuesto, toda emoción se transmite. Y aquí es donde yo quería llegar.

La alegría se transmite y aplicando el estudio anterior, cuantos más amigos tengamos, más posibilidades tenemos de estar alegres.
El estudio confirma que las personas más alegres son aquellas que tienen más número de amigos sin llegar a tener una verdadera amistad con ninguno de ellos, ya que por esa cadena de tres nudos se traspasa la alegría.
Yo era una de estas personas y lo confirmo, quizás tuviese mas días alegres pero ¿era realmente mi felicidad o la de otros?

En este tiempo he aprendido que la auténtica y propia felicidad se encuentra en las pequeñas cosas y en los pocos y verdaderos amigos que te hacen sonreír cada día por motivos propios.

Porque la vida debe ser una montaña rusa, no caídas en picado desde un décimo piso.



No hay comentarios:

Publicar un comentario